25 de agosto de 2014

El contra M-20: Albatros


Puntero:
  1. adj. Destacado,sobresaliente
     Todavía no sabemos como explicarles a los muchachos de la M-20 esta palabra, así que acudimos al diccionario de la Real Academia Española. Básicamente es lo que pasa cuando uno obtiene resultados positivos a lo largo de un campeonato. Estos jóvenes están descubriendo un mundo nuevo. Una buena hipótesis sobre porque los Pumas pierden aún estando arriba en el marcador y jugando mejor que el rival, es que la división de menores de 20 del Club Argentino de Rugby está puntera en el torneo de la URBA grupo I desarrollo. Ningún país con semejante prontuario puede triunfar ni en un torneo de truco. 

     El domingo pasado en Avellaneda, el rival de turno fue Albatros. A pesar de las intensas lluvias, la cancha del local, el mítico “CAR Nou”, hizo una demostración de su sistema de drenaje europeo que dejó el campo de juego en perfectas condiciones. Para todo el que pensó que estábamos siendo sarcásticos, hay que aclarar que no. Lamentablemente para los chicos de la “20”, las condiciones estaban perfectas para que se juegue buen rugby. Entre los ingenuos espectadores y padres con muchísimo amor por sus hijos, se puede destacar un personaje especial. Representa todo lo que es la división y el espíritu de este deporte. Un poco obeso, ridículamente en ojotas y con las piernas al aire entre el barro y unos 11 grados de temperatura. Negro como el mal, impulsivo, con ojo crítico y analizando a quien le puede robar un pedazo de comida: he aquí “El fantasma de la M-20”
El fantasma merodeando la concentración del equipo local
         
         Si hay algo para analizar en este partido fue que el Tino comenzó ganando y sigue vigente el alerta meteorológico luego de eso.  Lo que no es sorpresa es el estilo de juego. Vamos por partes. Por el lado de los forwards, el partido fue más que incómodo. El scrum fue para adelante, se sufrió con el maul, pero mas se sufrió con las continuas patadas que presentó el partido, obligando a los gordos a desplazarse por el campo de juego en reiteradas veces. Destacable actuación de Lucio Gallo Auditorpe, que se llevó a su casa varias nueces de Adán, cuellos y mentones rivales. Como dato de color, dos tries del CAR llegaron desde el mismo lugar, con un line out y la misma jugada. Ingenuo el pack rival, pensó que el Tino poseía un repertorio amplio de jugadas y nunca descifró la falta de creatividad de los de enfrente.

     Por parte de los backs, como de costumbre, hubo una exhibición de habilidades. Un punto fuerte fue el 10 y capitán, Pedro Straschnoy. 1/6 en patadas a los palos. La única buena desde el touch, para demostrar que nos estaba jodiendo, es esquizofrénico o tuvo un *rto tremendo algo de magia quedaba. Su mal día quedó representado en un kick al touch, producto de un penal a favor. “Pedro, por favor, sacala, no podemos más”, le pidieron los forwards. No hace falta decir que esa pelota quedo dentro de la cancha y privó al gordo Matia' Galleano, que jadeaba como perro observando unas chuletas, de su descanso. “Pedro, dejá, no la saques por favor, no te hagas drama”, fueron las palabras cábala de apoyo para las patadas que le siguieron. Como el tercer tiempo es parte del partido, Pedrito continuó con su actuación estelar sentándose en un asiento que cedió, dejando su sensible cuerpito en el suelo y siendo objeto de risa de propios y extraños. Si hay algo que destacarle al apertura, fue su humildad para saber que su pie estaba más inestable que el peso argentino, cediéndole a Manuel “Ze Pequenho” Bayerca su lugar como pateador. Cual lateral brasileño, tomó carrera y le pegó “a colocar” en la única que tuvo para convertir. Una lástima que se le haya ido por encima del travesaño. Ahh, es verdad, era rugby. Una de una para “Manu”.

     
     Facundo Gamindez. El “Topo”. Amado por todos, contrató un párrafo por cada  columna a principio de año y, como un contrato es un acuerdo legal que no se puede romper, aquí va su porción. Gran contraataque generado por el fondo del Tino. Los números daban esperanzas, las manos, no. El "Picanchi" Gamindez y Ramsey, contra un adversario indefenso, en velocidad y campo rival. El manual del ¾ dicta clavar a la marca y cedérsela al compañero. El manual "Topo" de 1835, dicta un pase tres metros detrás de la posición del compañero para generar un contraataque rival de lo que era medio try propio. Pasaron los minutos y Facu tuvo revancha. Tiro medialuna para desbordar por el touch, pero ante la presencia de un rival, optó por pasar (pasar es una forma dulce de decir, fue una grande de napolitana sin ajo) la ovalada hacia adentro. Sin mirar. De casualidad, allí estaba Franco "Chanchu" Iturria para recoger el balón sobre su cabeza, lo que pudo haber terminado con fisura de 2 a 3 costillas si hubiese recibido un tackle. Facundo, quien suele pasar los días del amigo con algunos ex presidentes y árbitros, exclamó sobre esa jugada: “El equipo juega de memoria. Yo dije 'Bueno son más o menos las tres de la tarde, Franco debe andar por ahí', y mis cálculos no fallaron”
     
     Terminó el encuentro 30-10 y el equipo festejó, vaya uno a saber con qué cara. Los entrenadores, conformes, felicitaron a sus dirigidos. Carlos “Cacón” Pastorini pudo dormir tranquilo con el desempeño del scrum y Fernando “Alemán” Horssiszgberghker también, ya que en el buffet las cervezas no se acabaron.

PD: Cristobal Carbone no fue amonestado. Tampoco Santiago Laggiard. Aunque no confíe, somos una fuente confiable.


PD2: El corte de pelo de Ramiro "Kill Machine" Ares lo hace parecido a Néstor Kirchner. Ramsey, vos también sos “Gold Member” de la columna, no te ibas a escapar.



Por Franco Ercolano 









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